Eventos corporativos: una valiosa herramienta de marketing.

La llegada de la pandemia marcó un antes y un después en el entorno empresarial y no nos referimos únicamente al impulso de la digitalización, sino también a la forma en que las marcas se relacionan y comunican su mensaje.

Transparencia, confianza y cercanía son las claves de esta cultura organizacional emergente y los eventos corporativos son la herramienta ideal para transmitir estos valores.

¿Qué son los eventos corporativos?

Son actos sociales que organiza una empresa para reunir a personas con intereses afines a sus objetivos comerciales (clientes, socios, accionistas, empleados)

Estos eventos pueden variar en tamaño y alcance. Normalmente buscan obtener un retorno de inversión, ya sea consiguiendo ventas, socios inversores, etc. Aunque algunas veces el beneficio que se espera conseguir es intangible, por ejemplo, fortalecer la identidad de la marca, mejorar el clima laboral o fidelizar a los clientes. En general, son una pieza clave dentro de las estrategias de branding corporativo.

¿Cómo organizar eventos corporativos?

La gestión de eventos corporativos es muy laboriosa y requiere una planificación exhaustiva. Por lo tanto, lo mejor es contratar a una empresa especializada. No es difícil encontrar empresas dedicadas a la organización de eventos en Madrid, Barcelona, Bilbao y las principales ciudades de España.

En función del tipo de evento estos serían algunos de los pasos a seguir:

1. Definir el objetivo: conseguir ventas, conseguir colaboradores o potenciar la identidad corporativa. Conocer los objetivos es esencial para crear estrategias eficaces.
2. Elegir el formato del evento en función de los objetivos y del target hacia el que está dirigido.
3. Establecer un presupuesto teniendo en cuenta número de asistentes y de los servicios que se ofrecerán.
4. Elegir el día y el lugar. La fecha seleccionada no debería coincidir con un festivo u otros eventos con gran afluencia en la ciudad. En cuanto al lugar podría ser un hotel, teatro o auditorio.
5. Promocionar el evento en redes sociales, página web o campañas de e-mail marketing.
6. Desarrollar un programa de contenidos con presentaciones, actividades y tiempos de descanso.
7. Organizar la logística del evento: contratación de servicios de catering, decoradores, equipos audiovisuales, etc.
8. Contratar personal de apoyo si es necesario.
9. Implementar un sistema de registro para que los participantes puedan inscribirse.
10. Hacer una evaluación posterior al evento haciendo encuestas de satisfacción o revisando el feedback de las redes sociales para saber si ha tenido un impacto positivo y ha contribuido a lograr los objetivos de la empresa.

Formatos comunes de evento.

Los eventos corporativos pueden adoptar diferentes formatos en función del objetivo empresarial y su público objetivo.

Podemos hacer una primera distinción entre:

• Eventos internos: se dirigen a los socios empleados o accionistas de la empresa y suelen tener un carácter informativo o motivacional.
• Eventos externos: se dirigen a los clientes, proveedores o medios de comunicación y suelen tener fines comerciales.

Teniendo en cuenta esta aclaración, algunos formatos populares de eventos son los siguientes:

• Eventos de team-building: favorecen la comunicación interna y el trabajo en equipo.
• Congresos: se convocan a personas afines al sector para ponerse al día de las novedades.
• Foros: son espacios de debate donde los asistentes participan exponiendo su visión sobre un tema concreto. Impulsan el carácter innovador de la empresa.
• Seminarios: tienen una finalidad formativa y están enfocados a un número reducido de asistentes expertos en sus áreas.
• Workshops: son talleres para adquirir conocimientos sobre un tema específico.
• Conferencias: es el formato más clásico de evento corporativo. Suelen celebrarse en un auditorio con varios ponentes que hacen exposiciones orales sobre diferentes temas.
• Jornadas: reúnen a profesionales del sector con un objetivo común. Suelen durar varios días, por lo que se realizan en hoteles o lugares con una buena infraestructura tecnológica y zonas de descanso.
• Ferias comerciales: constituyen un escaparate donde las empresas pueden anunciar el lanzamiento de nuevos productos y servicios y hacer demostraciones en vivo.
• Fiestas de empresa: entregas de premios, galas o inauguraciones. Celebran los logros empresariales o hitos importantes en la trayectoria de la organización. También pueden tener un carácter benéfico, por ejemplo, recaudar fondos para causas sociales.
• Ruedas de prensa: son eventos dirigidos a los medios de comunicación.
• Juntas generales de accionistas: se celebran para informar a los accionistas sobre cuestiones relevantes de la empresa o elegir al Consejo de Administración.
• Webinars: son eventos online, donde un grupo de expertos comparte sus conocimientos con una audiencia global.

¿Por qué incluir los eventos corporativos en la estrategia de marketing?

Si se planifican y gestionan adecuadamente los eventos corporativos son una herramienta eficaz para que las empresas logren alcanzar sus objetivos.

Algunas ventajas destacadas:

• Motivan al personal y fomentan la cohesión del equipo.
• Consolidan los valores de la empresa.
• Son una buena forma de hacer networking y conectar con nuevos clientes, socios y colaboradores.
• Consolidan la identidad corporativa.
• Ayudan a diferenciarse de la competencia.
• Abren nuevas posibilidades de negocio y colaboración.
• Sirven para anunciar el lanzamiento de un producto o conseguir ventas directas.
• Fidelizan a los clientes habituales y refuerzan el recuerdo de la marca.

En un mercado tan competitivo como el actual los eventos corporativos son esenciales para que las empresas logren relaciones comerciales más duraderas y cercanas. ¡Aprovecha su potencial e incorpóralos en tu estrategia de branding!