Vivimos en una Era marcada por los cambios tecnológicos. La transformación digital avanza a pasos agigantados y la inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías más prometedoras en este horizonte inmediato ya que ha demostrado tener un potencial inmenso para impulsar el rendimiento en diferentes áreas empresariales. Su capacidad para encontrar patrones tras analizar enormes cantidades de datos (casi imposibles de procesar mediante el trabajo humano) se traduce en un ahorro de tiempo y costos operativos. Un buen ejemplo sería el cribado de currículums que realizan los departamentos de RRHH durante los procesos de selección de personal. CV e IA son una combinación ganadora para la búsqueda de empleo. Los reclutadores recurren a esta tecnología para mejorar la toma de decisiones e identificar rápidamente a los candidatos ideales para el puesto, mientras que los solicitantes pueden utilizarla como guía para personalizar su CV y hacerlo más atractivo. Aunque no todo son ventajas y la IA tiene también sus limitaciones e inconvenientes, sobre todo si se utiliza sin supervisión.
¿Cómo ayuda la IA a los solicitantes de empleo?
La IA generativa es realmente provechosa para los candidatos que necesitan optimizar su CV. Puede automatizar tareas repetitivas, desde organizar la información a crear una estructura específica. Plataformas de creación de currículum como CVapp utilizan un potente motor de inteligencia artificial que permite adaptar el formato y el contenido del CV resaltando aquellas cualidades que son relevantes para el puesto.
También podemos utilizar esta tecnología para mejorar la redacción, corregir faltas de ortografía o expresar ideas de manera más clara y concisa.
Además, la IA nos ayuda a optimizar el CV para cumplir con los estándares de los sistemas de seguimiento de candidatos (ATS). Por ejemplo, puedes sugerir la inclusión de palabras clave específicas aumentando así las posibilidades de que el CV sea preseleccionado.
Eso sí, es importante hacer un uso ético de la IA y asegurarse de que la información generada sea precisa y veraz.
Uso de la IA para la selección de personal.
La IA puede lograr que el proceso de selección de personal sea más eficiente y ágil. Se terminaron los escritorios inundados de papeles, la inteligencia artificial extrae datos automáticamente de los currículums y filtra en función de criterios específicos como la ubicación geográfica, las habilidades o la experiencia laboral. De esta forma es posible encontrar con mayor rapidez aquellos perfiles que se ajustan al puesto. También puede identificar tendencias y patrones de contratación. Esto ayuda a saber si un candidato tiene una trayectoria profesional que encaja con la cultura de la empresa.
Limitaciones de la IA en la creación y cribado de CV.
Hasta ahora hemos visto que la IA es una herramienta valiosa para optimizar el CV y aumentar las posibilidades de encontrar empleo. Además, ahorra mucho tiempo a los reclutadores de personal en los procesos de selección. Pero no podemos ignorar que tiene carencias y limitaciones importantes, por ejemplo, no es capaz de medir adecuadamente el impacto de las contribuciones o los logros de los aspirantes al puesto.
En lo que respecta a los sesgos de género, edad o raza, la IA puede arrojar resultados dispares. Por un lado, puede ayudar a eliminar estos sesgos al no estar sujeta a los prejuicios humanos, centrándose únicamente en datos objetivos y medibles. Pero si la información utilizada para entrenar la IA refleja sesgos históricos es posible que reproduzca estos estereotipos al hacer un filtrado de los candidatos. Esto puede ocurrir porque las personas que programan y configuran las IA no son conscientes a veces de sus propios sesgos. Por esta razón, las empresas deben realizar auditorías periódicas para evitar que esta tecnología se utilice de manera inapropiada. La formación y concienciación en materia de equidad y diversidad son esenciales para hacer un uso responsable de la IA en los procesos de contratación de personal.
Por otra parte, y a pesar de la utilidad de la IA en la creación de currículums, estos todavía resultan bastante impersonales y es necesario revisarlos para dotarlos de un “toque humano”.
Conclusión
En definitiva, tanto los reclutadores de personal como los candidatos deben desempeñar un papel activo en la contratación y búsqueda de empleo. La IA es una herramienta estará cada vez más presente en todos los ámbitos empresariales por su increíble capacidad para agilizar la toma de decisiones, pero no debería sustituir el juicio humano en áreas tan importantes como la selección de personal. No olvidemos que el trabajo es uno de los pilares de nuestra sociedad y las empresas deberían elegir también a sus trabajadores con empatía. Trabajamos codo a codo con personas y no con perfiles; así que hagamos un uso honesto y responsable de las tecnologías para garantizar un equilibrio en el mundo laboral.
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