El marketing de nostalgia es una técnica de neuromarketing que utiliza el poder evocador de los recuerdos del pasado para atraer la atención de los consumidores y hacerles revivir momentos felices. Así se genera un estado de ánimo positivo y propicio para conectar con nuestros posibles clientes.
¿Qué encontrarás aquí?
¿A quién está dirigido?
El marketing de nostalgia está dirigido principalmente al público millennial que fueron niños o jóvenes en las décadas de los 80′ y 90′.
De todas formas, al rescatar iconos que forman parte de la cultura popular, muchas veces este tipo de productos tiene también la capacidad de gustar a las generaciones más jóvenes.
Según afirma la consultora Deloitte: «Lo retro genera comunidad para quien se siente identificado con los iconos de cierta época. Para la gente joven se puede convertir en algo nuevo, con lo cual puedes estar tocando dos tipos de target a la vez».
Nostalgia en tiempos de crisis.
El Dr. Constantine Sedikides, líder de un equipo de investigadores de la Universidad Southampton, descubrió que la nostalgia reduce el estrés y la ansiedad proporcionándonos cierta calma y bienestar psicológico. Además, según sus estudios, las personas sentimos nostalgia por lo menos una vez a la semana.
No es extraño que el marketing de nostalgia se convirtiera en tendencia publicitaria al inicio de la crisis, con el rescate de los productos más básicos. Ana Barrio, directora de innovación de la consultora Nielsen comenta que «Danone lanzó el formato de medio kilo y lo presentó como el Danone de siempre; lo planteó como una vuelta al origen, otra de las tendencias que ahora está en boga».
Vivimos en un mundo marcado por el desarrollo tecnológico en el que cada día surge una novedad, por eso los recuerdos del pasado nos atraen especialmente ya que transmiten tranquilidad y confianza.
Según un estudio publicado en 2014 por el Journal of Consumer Research, cuando los consumidores sienten nostalgia hacia una marca, están dispuestos a pagar más por ese producto: «La nostalgia puede reflejar una conexión social más amplia y es capaz de cambiar las motivaciones de las personas» – comentan.
Otro estudio de la consultora Euromonitor llegó a conclusiones similares y apunta además a la incertidumbre económica como uno de los factores de éxito: «En un clima económico incierto, los consumidores ven el pasado de color de rosa y están dispuestos a gastar en cualquier producto o servicio que les ayude a recrear las sensaciones de calidez y seguridad que sintieron durante tiempos más felices».
¿En qué contextos podemos utilizar el marketing de nostalgia?
Dependiendo de nuestro tipo de producto o servicio, nuestra estrategia de branding se puede ver beneficiada por el impacto que genera el componente de la nostalgia.
Algunos contextos en los que podemos utilizar el marketing de nostalgia son los siguientes:
- Revivir un producto que se descontinuó en el pasado.
- Conmemorar un hito o fecha histórica para la marca.
- Destacar un cambio importante en la empresa, por ejemplo un cambio de nombre o logotipo.
Algunos ejemplos de éxito del marketing de nostalgia.
El marketing de nostalgia tiene un gran éxito en el sector audiovisual. Un ejemplo sería el videojuego de Pokémon GO que rescata un dibujo animado de los ’90 y lo lleva a la realidad aumentada.
La fiebre de lo vintage ha alcanzado también al sector del ocio, el cine y las series. Todos recordamos series como Stranger Things de Netflix, con múltiples reminiscencias ochenteras a la cultura pop.
Otra marca que realizó una campaña basada en el marketing de nostalgia es Microsoft que para promocionar su nuevo y mejorado IE creó un anuncio llamado «Child of the 90s».
Por su parte PlayStation hace una retrospectiva de los juegos lanzados por la compañía desde 1995 hasta la actualidad. La finalidad no es otra que recordar a sus seguidores los buenos momentos que han vivido jugando sus aventuras a lo largo de los años.
¿Os acordáis de algún otro ejemplo? ¡Seguro que sí! En estas fechas estamos más nostálgicos que nunca, las marcas lo saben y nunca falta una buena dosis de marketing de nostalgia en los anuncios navideños.
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