¿Tienes pop-up en tu web? Google te podría estar penalizando.

Seguro que te has encontrado alguna vez mientras navegabas por Internet con un anuncio emergente prometiéndote un premio por ser el navegante número un millón.

Los pop-up son uno de los formatos de publicidad online más odiados por los internautas, sobre todo cuando acceden a los contenidos desde dispositivos móviles, ya que estos tienen una pantalla más pequeña y a veces resulta difícil cerrarlos, entorpeciendo así la navegación por el sitio web.

A pesar de esto, muchos medios y apps siguen empleando de forma consciente este tipo de anuncios intrusivos en su afán por obtener ingresos de forma rápida.

Los pop-up no son un problema nuevo, pero su presencia en los medios online ha ido en aumento en los últimos años, apareciendo incluso en las cabeceras de sitios web con buena reputación. Muchos de ellos resultan incluso imposibles de cerrar y otros bloquean el botón de ir atrás, por lo que la única manera de abandonar la ventana emergente es cerrar esa pestaña del navegador.

¿Por qué se recurre a la publicidad intrusiva?

La respuesta a este problema la hallaremos en los marketplaces. Los medios utilizan cada vez más ad exchanges y algunos de ellos se están convirtiendo en el punto de entrada para anuncios que explotan el Java Script. Aunque las plataformas publicitarias más importantes prohíben este tipo de sistemas, no lo hacen todos los ad exchanges ni hay una normativa firme contra ellos.

Sin embargo, desde enero del año pasado, Google penaliza de algún modo a estos sitios que generan una mala experiencia de usuario.

Al igual que sucedió hace dos años con las webs que no contaban con un diseño responsive, la nueva actualización de Google afecta a las webs que utilizan ventanas emergentes o pop-up, sobre todo en dispositivos móviles.

¿Todas las webs con pop-up serán penalizadas?

En principio las penalizaciones sólo afectan a aquellos casos en los que la ventana emergente oculta el contenido principal, pantallas que el usuario debe descartar antes de acceder al contenido, etc..

No afecta a los avisos legales (como por ejemplo la solicitud de verificación de edad para páginas de adultos, avisos de cookies o cuadros de inicio de sesión). Tampoco se penalizarán banners siempre que se ajusten bien a la pantalla y se puedan descartar fácilmente.