Seguro que alguna vez has oído decir a un amigo o familiar que le gustaría montar su propia empresa, pero ¿cuántas de esas personas han emprendido realmente? Es cierto que no todos cuentan con las mismas facilidades: una situación económica favorable o un entorno cercano al mundo de los negocios son factores que suelen conducir al éxito empresarial, pero incluso si no tienes estas ventajas no deberías tirar la toalla a la primera de cambio. Hoy te hablaremos de algunas aptitudes de un emprendedor de éxito que te ayudarán en tu iniciativa empresarial.
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¿Hay personas predestinadas a ser emprendedores?
Indudablemente, crecer en un núcleo familiar empresarial facilita mucho las cosas. La gran mayoría de emprendedores tienen un padre o familiar emprendedor. Los hijos de empresarios crecen rodeados de una cultura emprendedora y piensan que iniciar un negocio es algo factible, mientras que en otras familias de padres trabajadores se les enseña a los niños que es importante conseguir un empleo y trabajar duro para triunfar en la vida. Crecen por lo tanto pensando que emprender es algo arriesgado y tienen un elevado miedo al fracaso.
Sin embargo, prácticamente cualquier competencia empresarial se puede adquirir o aprender. Así que a la pregunta de si hay personas predestinadas a ser emprendedores, la respuesta es sí. Pero también es cierto que algunos emprendedores no lo han tenido nada fácil y aún así han logrado sacar a flote sus iniciativas con mucha autodeterminación. Te contaremos cuáles son algunas de las aptitudes de un emprendedor de éxito que puedes trabajar en tu día a día.
Perseverancia
¿Eres perseverante? La perseverancia podría definirse como constancia, persistencia. firmeza, dedicación, tesón… Se aplica tanto a las ideas como a las aptitudes y es un factor determinante en la realización o consecución de nuestros objetivos.
Las cosas si no se persiguen o se abandonan antes de tiempo, no se consiguen. Alcanzar el éxito personal y profesional involucra esfuerzo y sacrificio. A cualquier emprendedor le gustaría alcanzar sus metas de manera inmediata, pero muchas veces estas tardan en llegar. Levantarse de un batacazo financiero o emocional sin ayuda requiere de mucha fuerza de voluntad y autodisciplina. Ser emprendedor significa también saber lidiar con el fracaso y ser perseverantes es tanto o más importante que tener iniciativa a la hora de emprender.
Aprender a gestionar el tiempo.
Tu tiempo es el activo más valioso que tienes pues es irrecuperable y no debes malgastarlo. Para gestionar mejor tu tiempo debes aprender a establecer prioridades, analizar las horas que dedicas a cada tarea y abandonar la obsesión por querer tenerlo todo bajo control. Muchas veces delegar trabajo en otro experto es una sabia decisión que te permitirá centrarte en lo que realmente importa.
Invertir tiempo y dinero en tecnología.
Los emprendedores y PYMES con cierto desarrollo tecnológico y presencia en el mundo digital resistieron mejor la crisis financiera vivida a raíz de la pandemia.
Las tecnologías juegan un papel muy importante en la generación de procesos eficientes. Gracias a ellas podemos automatizar tareas específicas, reducir errores y retrasos en el flujo de trabajo. Como emprendedor, deberías estar dispuesto a invertir tiempo y dinero en aquellas herramientas digitales que aumentan la productividad de tu negocio.
Aprender idiomas (sobre todo inglés).
El inglés es por excelencia el idioma del mundo de los negocios. Una de cada cinco personas en el mundo habla en inglés y la mayoría de los sitios web están en este idioma.
Saber inglés aumentará tus oportunidades profesionales de forma exponencial, te permitirá estar actualizado y promocionar tu negocio internacionalmente o incluso buscar el apoyo de algún inversor sin preocuparte por las limitaciones del idioma.
Ser creativo
Un emprendedor necesita ser creativo no sólo para iniciar su proyecto sino también para mantenerlo a flote. En el mundo de los negocios la creatividad es esencial ya que gracias a ella puedes diferenciarte de la competencia y sobresalir en el mercado.
Para generar ideas creativas debes empezar por lo más básico: pensar, observar e investigar. Trata de dar respuesta a necesidades o problemas cotidianos. Un emprendedor que pone toda su pasión en los procesos creativos logrará alcanzar resultados extraordinarios.
Trabajar las habilidades comunicativas.
Son esenciales para alcanzar el éxito empresarial. Todos pensamos que tenemos el don de la palabra, pero muchas veces esto no se corresponde con la realidad.
Aprender a presentarnos, resolver conflictos, mejorar nuestra capacidad negociadora o las habilidades para el liderazgo son algunas de las aptitudes que como emprendedores debemos trabajar en nuestro día a día.
Aprender a detectar oportunidades de venta.
Las oportunidades de venta son el oxígeno vital de cualquier negocio y desaprovecharlas significa perder dinero. Pero ¿cuáles son tus posibles clientes? No todos los que reciben información sobre tu producto o servicio están interesados en adquirirlo.
En las grandes empresas esta tarea normalmente está a cargo del departamento de ventas y del departamento de marketing (Smarketing). Si todavía no puedes contar con esta infraestructura, te conviene al menos externalizar el servicio a una agencia de Inbound Marketing. Ellos te ayudarán a definir tu target, llevar un registro de todos tus contactos y diseñar una serie de estrategias (embudo de ventas) enfocadas a lograr conversiones. Entender cómo funciona este complejo mecanismo es muy útil en todos los aspectos, incluso podrás detectar nuevas demandas en un segmento de mercado tal vez por explorar o con escasa competitividad.
¿Te han gustado estos consejos? Realmente todos podemos desarrollar aptitudes de emprendedor, pero no siempre tenemos tiempo suficiente o una situación propicia para emprender. Si este es tu caso, puedes crear un currículum online y aumentar así tus posibilidades de encontrar empleo. ¡Siempre hay un momento ideal para alcanzar tus metas! 😉
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